terça-feira, 6 de janeiro de 2015
..................y todo ha cambiado
Algunos días especiales levantas la mirada y todo ha cambiado.
Es un cambio invisible, que no depende de las circunstancias, ni de las emociones diarias.
Es un cambio que procede de un lugar profundo, como si en las cocinas del infierno de tu mente hubieran estado cociéndose unos guisos de los que ahora se te permite sentir su aroma.
Un perfume que es un recordatorio de que siempre habrá algo que está por encima de tu ilusa omnipotencia y aguerrida voluntad, y que los cambios vienen cuando vienen y no cuando quieres que vengan.
Y ahora ves que fuiste enviada a un largo exilio de esa patria tranquila y cómoda de la que gozaron tantos.
Pero tú no. Tú no.
Tú fuiste enviada a unas guerras de Troya que no eran las tuyas, pero que se hicieron tuyas.
Se hicieron tuyas.
Y ahora que acabaron, y que por fortuna sobreviviste, se abre un camino por el que puedes volver a ese lugar tranquilo y cómodo que anhelaste.
Y ahora que soy libre de retornar, no sé si quiero.
No se vuelve de un exilio indemne, con la ingenuidad del obediente.
Aina Cortiñas Payeras
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Gracias Susana por compartir mi texto!
ResponderEliminarEste escrito és Precioso!!!
ResponderEliminarTengo aquí varios textos tuyos...
Hoy mismo hay publicado otro tuyo
Gracias Ana!!!