segunda-feira, 25 de maio de 2020

Uma Peregrina em Busca de Ti Mesma






- Hoje é um dia muito especial para ti, e se um dia vieres a ser o que realmente és, recordá-lo-ás para sempre. A partir deste momento, vais começar a pensar só na tua vida. Trabalharás duramente todos os dias para aprenderes a conhecer-te melhor, porque só conhecendo-te a ti mesma poderás ser livre, e só sendo livre, serás capaz de enfrentar qualquer problema e perigo.
A fé em ti própria será o teu escudo e terás consciência de estar a viver a tua Verdadeira Vida.
Ficarás a conhecer aquilo que a natureza te deu e utilizarás com conhecimento e sabedoria o teu corpo, a tua mente e o teu espírito.
Se conseguires superar todas as provas a que fores submetida, serás o exemplo vivo da grandeza da mulher que, nos séculos passados, era testemunhada pelas Akllakuna, as verdadeiras artífices do desenvolvimento do Tawantinsuyo e do Governo Cósmico das Quatro Regiões dos Andes.
Serás uma Peregrina em busca de ti mesma.
Em tempos que já lá vão, as mulheres percorriam este itinerário sob a orientação das Mamakuna. Posteriormente, a invasão espanhola interrompeu a tradição deste ensinamento, o qual, a partir desse momento, passou a estar acessível apenas a um grupo restrito de mulheres: aquelas que saíam vitoriosas de todas as provas a que eram submetidas.
Faziam parte da Elite Feminina chamada Intip Chinan e representavam a Essência da Feminilidade Andina.
Por terem sido formadas na dura escola do Akllawasi mostravam-se capazes de tudo, passando depois a estar ao serviço da sociedade na qualidade de sacerdotisas, mestras, esposas, guerreiras, administradoras, embaixadoras ou governantes. Nesse tempo, eram consideradas as jóias mais preciosas do povo do Towantinsuyo.

A pergunta fundamental, porém, é a seguinte: estarás tu disposta a sacrificar tudo, a enfrentar todo e qualquer risco para aprenderes a conhecer e a usar o Poder que irás receber?

São poderes extraordinários que a mulher possui, e que apenas devem chegar às mãos daquelas que se mostrem capazes de os conquistar. São poderes que só se podem oferecer e só se devem ensinar às pessoas que se conhecem a si mesmas, que percebem quem são e qual o Caminho que devem seguir.
Espera-te um percurso árduo e terrível, que decerto te fará sofrer, porque as provas que terás de enfrentar são extremamente severas. Terás de ser paciente e perseverante, pois só se consegue compreender a Natureza quando se tem paciência. Terás de demonstrar uma grande força de vontade, muita constância e coragem para conseguires alcançar o céu.
Confia em ti e não temas o que te espera. A mais pequena dúvida deitará tudo a perder!
Agora, visualiza aquilo que desejas e, se te preparares adequadamente, obtê-lo-ás.


in, A Profecia da Curandeira
Hernán Huarache Mamani




Acllahuasi
Machu Picchu




Nota 1 - Tawantinsuyo, era o Império Inca.
Império Inca (Tawantinsuyu em quíchua) foi um Estado criado pela civilização inca, resultado de uma sucessão de civilizações andinas e que se tornou o maior império da América pré-colombiana, centrado na Cordilheira dos Andes, incluindo grande parte do atual Equador e Peru, sul e oeste da Bolívia, noroeste da Argentina, norte do Chile e sul da Colômbia.
A administração política e o centro das forças armadas do império ficavam localizadas em Cusco (em quíchua, "Umbigo do Mundo"), no atual Peru.

Nota 2 - Mamakunas, eram mulheres sábias, mestras do Akllawasi.
Mama-Cuna era, en la mitología inca, la suma sacerdotisa que instruía y vigilaba a las Acllas, Ñustas o Vírgenes del Sol durante el Imperio inca para que se dedicaran a su deber religioso.
Por extensión se llama también así al edificio en el que se recluía a las muchachas​ y a la institución de enseñanza en general.​
Así como el Amauta representa la máxima caracterización del hombre de saber, la Mamacuna constituye el elemento rector de la pedagogía femenina.
Su centro de acción fue el Acllahuasi o casa de las escogidas, dedicada a la preparación femenina y enseñanza práctica por antonomasia. A la mujer se le prepara para el hogar, las tareas domésticas o el sacerdocio.​ Esta educación tiene también un sentido de casta y matices peculiares, porque es la preparación de una élite característica y otra de tipo menor, doméstica, forjada a través del ejemplo y experiencia cotidianas. El origen histórico de la educación femenina se remonta a la primera coya Mama Ocllo- esposa de Manco Cápac, reina que instruye a las indias en los oficios mujeriles, a hilar, tejer algodón y lana y hacer de vestir para sí y para sus maridos e hijos: “decíales como habían de hacer los demás oficios del servicio de casa. En suma ninguna cosa de las que pertenecen a la vida humana dejaron nuestros príncipes de enseñar a sus primeros vasallos haciéndose el Inca Rey maestro de los varones y la Coya reina maestra de las mujeres”.
Pachacútec parece haber difundido la educación femenina en todo el ámbito del Tahuantinsuyu. También enseñaba a las mujeres a cocinar, tejer y atender al inca.

Nota 3 - Intip Chinan, eram as Adoradoras do Sol.
Las acllas (en quechua: aqllasqa, ‘escogida’) eran mujeres de singular belleza. 
Fueron escogidas de varios lugares del Imperio inca para servir al Inca o al Dios Sol o Inti.
Su preparación se llevaba a cabo en el Acllahuasi, donde vivían las mujeres bajo la vigilancia de las Mamakunas aisladas en un servicio de alto honor.

Existían tres tipos de Acllas: 
  •  Aclla del Sol: Dedicaban su vida entera a la adoración del Dios Sol. 
  • Aclla del Estado. 
  • Taquiaclla: Elegida por sus habilidades cantoras. Su labor era alegrar las fiestas de la corte imperial.

En el Imperio Inca, para proporcionar el mejor culto posible al dios sol, además de sus diversas clases de sacerdotes, los incas habían creado una importante institución de vírgenes dedicadas a su servicio, conocida como Intip Chinán, en la que ingresaban las niñas elegidas en su infancia (a los ocho años) para convertirse en acllas tras un estricto noviciado que cubría los primeros años de su estancia conventual, bajo la dirección de una superiora, mamacuna, educadora, vigilante y examinadora de las jóvenes sometidas a su tutela.

Acllahuasi era el nombre del templo de las acllas.
Pero esta profesión religiosa no era sólo una llamada o una obligación para acudir forzosamente al servicio de la religión, sino que se trataba más bien de una educación selectiva y esmerada para las jóvenes de las clases superiores, puesto que, una vez llegadas a la edad núbil, entre los trece y los quince años de edad, pasaban a ser "presentadas en sociedad", para ser las potenciales prometidas de señores de la nobleza, ya que el período de servicio en el Inti Chinán como aclla era también la garantía de la calidad de su linaje y el aval de la mejor educación y, evidentemente, la mejor prueba exhibible públicamente de su incontestable virginidad.

No guardar la obligada castidad y, sobre todo, ser sorprendida con un hombre significaba, para la vestal en ejercicio, su inapelable condena a muerte, a una muerte cruelmente ejemplar, dejándola que muriera de inanición, para que no fuera la mano del ser humano la que matara a las sacerdotisas, sino el abandono.

Si se llegaba a producir un embarazo de una de las aclla, siempre que no hubiera pruebas en contra de la exigida adhesión a la norma estricta de la virginidad requerida, se consideraba que tal embarazo había sido realizado por la explícita voluntad y personal acción del dios Sol y, automáticamente, el hijo que tuviera la vestal, era considerado privilegiado hijo del dios solar y, como tal, recibía un trato de favor para el resto de sus días.


Manuel Alvar Ezquerra: 
in, Vocabulario de indigenismos en las Crónicas de Indias





Sem comentários:

Enviar um comentário